Blog Terrores – Crítica, tráiler, imágenes y póster de Piraña 3D. Alexandre Aja sorprende a propios y extraños (teniendo en cuenta su trayectoria anterior como director) con esta orgía de tetas y cuerpos mutilados.

La fórmula del éxito comercial
El productor de 300 algo sabe respecto a crear películas de gran éxito comercial. En este caso la fórmula está clara: tetas + culos + rodaje de película porno subacuática dentro del film + concurso de camisetas mojadas + 3D + gore + remake de un clásico + director contrastado + humor + chico “inocente” al estilo ochentón + chica “virginal” + homenaje a Tiburón + niños en peligro + filtrado de fotos de chicas espectaculares en plan lésbico del rodaje + presupuesto “reducido” (24 millones de dólares)= Éxito comercial asegurado. El único riesgo asumido y calculado es el de la calificación de edades. Las críticas que realizó James Cameron a la película están justificadas, eran de esperar. La recaudación y la posibilidad de una secuela también: $83.188.165 (de hecho es un final que deja claramente presente la posibilidad de una secuela según la fórmula que explicitó Scream: más de todo).
Primera parte: Orgía de tetas y culos
Si algo no se le puede negar a Alexandre Aja es que es convincente, ¿queréis tetas y culos? (parece decir) Pues os las daré hasta que os canséis: actrices porno en plena faena (sin pasar del erotismo eso sí), concurso de camisetas mojadas, tetas “voladoras”… La primera parte de la película es un carrusel excesivo de tetas y culos. Se van preparando las líneas narrativas que concluirán en la segunda parte pero el protagonismo es de los cuerpos perfectos juveniles y retocados que serán descuartizados sin piedad más tarde debido, en parte, a su propia estupidez.
Segunda parte: Mutilación inmisericorde de los cuerpos perfectos
Podría pensarse que en esta película no se castigaría a los sexualmente liberados para salvar a los inocentes y virginales (aunque hayan llegado a coquetear con el otro lado) pero nada más lejos de la realidad (cinematográfica). Es una regla básica inquebrantable del género, parece pensar Aja (que también participa de las labores de guionista). Y el director se dedica a ello con ahínco, las mutilaciones son de lo más bestia y rebuscado que he visto últimamente (no reproducimos imágenes por la bestialidad de las mismas), hay incluso algunas de ellas que parecen un castigo a la moralidad de los que las sufren (hablamos de cierto miembro). De nuevo Aja sigue por el camino del exceso…
Pirañas digitales 3D. Valores técnicos
Vaya por delante que no me acaban de convencer las pirañas digitales, prefiero las antiguas, no sé que me pasa pero me cantan mucho los efectos digitales. Me han gustado mucho mas las labores de maquillaje de los cuerpos ensangrentados y mutilados. Por otra parte me ha parecido un hallazgo el uso de las cámaras de alta definición para reflejar el movimiento del agua, creo que es una vía todavía poco explorada. La dirección es excelente, como no podía ser de otra forma, viniendo de Aja. La separación entre el mundo de la superficie y el subacuático también está muy lograda, éste último se muestra oculto, inaccesible pero lleno de vida y peligros.
Conclusión
La película viene a ser un intento de trasladar la fórmula de las explotation al reino del mainstream por la vía del exceso pero carece del encanto naíf de las primeras y su estética setentera-ochentera. Aja es uno de los directores más interesantes del género en la actualidad, tiene ideas y fuerza (destacar entre su filmografía Alta tensión, Las colinas tienen ojos y Reflejos) pero este no es el camino. Creo que más que una película de terror es una comedia terrorífica (aunque el abuso del gore en la segunda parte del film también la aleja de esta categoría). Por otra parte el gore tampoco es el camino, el género necesita una nueva capacidad de explorar los miedos y terrores de la sociedad contemporánea, en este sentido la rama de la Nueva Carne me parece mucho más cercana a los miedos contemporáneos.

José Mª Martín